Tipos de Faciales:
Para pieles deshidratadas:
Indicado en pieles secas o deshidratadas con sensación de tirantez al gesticular, falta de turgencia y sensación áspera al tacto. La piel puede estar deshidratada independiente si es un tipo de piel mixta, grasa o normal.
Para pieles con fotoenvejecimiento:
Indicado en pieles que han estado expuestas al sol en años anteriores o actualmente. Estas pieles se caracterizan por manchas, arrugas precoces, falta de luminosidad y en ocasiones, laxitud.
Para pieles con rosácea y rojeces difusas:
Indicado en pieles que se enrojecen fácilmente o presentan rosácea. El objetivo es calmar la piel y desinflamar los tejidos y así disminuir el daño progresivo característico de esta condición.
Para pieles cursando menopausia:
La piel es extremadamente sensible a los cambios hormonales. Durante el período de la menopausia aparecen alteraciones que pueden ir desde sequedad y flaccidez de la piel hasta apariciones de algunos comedones. El tratamiento consta de la aplicación de fitoestrógenos que ayudan a normalizar el funcionamiento de la piel.
Para pieles grasas y tendencia al acné:
Indicado en pieles con secreción excesiva de sebo, presencia de comedones abiertos (puntos negros) y cerrados (espinillas). En este tipo de pieles es importante una limpieza exhaustiva. Está contraindicado el masaje facial y la sobre estimulación de las glándulas sebáceas. Logra balancear el brillo en la superficie de la piel y ayuda a prevenir la aparición de nuevos comedones.